Habitación amplia con jacuzzi, perfecto para relajarse después de hacer senderismo en la zona. Acceso complicado con maletas por no tener ascensor.

Decoración cuidada, Atmosfera especial, Baño amplísimo

Falta de enchufes en ambos lados de la cama!!! Es un reto subir las maletas a la tercera planta sin ascensor.

El trato del personal fue excepcional, haciéndonos sentir como en casa desde el primer momento.

La falta de ascensor puede ser un inconveniente para algunos, especialmente si te alojas en la tercera planta.

El desayuno ofrecido era delicioso y muy variado, con

opciones frescas y locales que no te puedes perder. La atención del personal fue destacable, siempre de buen humor y dispuestos a ayudar. Sin embargo, el acceso al hotel puede ser un poco complicado con maletas, así que tened cuidado con las escaleras.

El hotel tiene un ambiente muy acogedor con habitaciones amplias y confortables, además de estar cerca de un parking gratuito. La atención al detalle en la decoración realmente resalta.

me sentí como un vip, no tengo ninguna razón para quejarme

Es un hotel encantador con decoración exquisita y un desayuno excepcionalmente variado, incluyendo productos frescos de la zona y un delicioso jamón ibérico, y el personal es muy atento y servicial.

cerca de los mejores lugares para recorrer y disfrutar al aire libre

mi estancia fue excelente ya que el hotel se encuentra a menos de 5 minutos a pie de la maravillosa colegiata de alquezar, y el desayuno servido en mesa fue impresionante con productos frescos de la zona.

Ay, Dios mío! El desayuno fue de otro nivel. un festín en la mesa con tortillas recién hechas y productos locales que hacen que tus papilas estallen de felicidad. Además, la ubicación es perfecta, a solo un paseo de la Plaza Mayor. Me encantó la decoración, un verdadero museo de antigüedades que da un toque especial al lugar.

Pero, para ser sincero, el acceso a la habitación en la tercera planta puede ser un desafío si llevas peso. ¡Subir maletas puede ser un workout! Y aunque la bañera grande es un lujo, me hubiera decantado por una ducha moderna para más espacio.

buenas experiencias pero con detalles a mejorar

La habitación era espaciosa, con dos balcones que ofrecían vistas maravillosas. El desayuno fue un deleite, con productos frescos de la zona y la posibilidad de repetir café, algo que agrada mucho. La atención del personal fue destacada, siempre amable y dispuesto a ayudar.

El acceso sin ascensor puede ser un inconveniente, especialmente si llevas equipaje pesado.

la bañera hidromasaje fue perfecta para relajarme. el aire acondicionado tenía problemas.

La habitación era amplia, con una bañera de hidromasaje que fue perfecta para relajarse. El desayuno servido en la mesa fue exquisito, con productos locales fresco y un sabor increíble. Sin embargo, el acceso por las escaleras puede ser complicado si llevas equipaje pesado, y la falta de enchufes cerca de la cama resulta un poco incómoda. A pesar de eso, el ambiente es acogedor y la decoración tiene su encanto.

El hotel presenta una decoración cuidada y tiene un entorno encantador. El desayuno es variado y con opciones muy interesantes. Sin embargo, noté la falta de un ascensor, lo que puede ser incómodo para algunos, y faltaron enchufes en los lados de la cama, lo que habría sido útil.

La habitación Merlot, un auténtico lujo, con un jacuzzi perfecto para dos. Los desayunos, con tortilla recién hecha y productos de la zona, son espectaculares. Un pequeño detalle a cuidar sería mejorar el acceso con maletas, pero no resta a lo maravilloso del lugar.

no dudaría en recomendar este hotel for una breve escala,

encantadora habitación, exquisito desayuno, el personal atento y educado nos hizo sentir muy bienvenidos con un trato excepcional, y la ubicación es perfecta, a pocas calles del centro histórico y con fácil acceso al aparcamiento.

Estoy totalmente satisfecho.

Las habitaciones son cómodas y los baños, incluyendo el jacuzzi, son amplios. El desayuno no es tipo buffet, lo sirven en la mesa y es exquisito, con tortilla recién hecha y productos locales, lo que añade un toque especial a la experiencia.

La decoración de las habitaciones se siente un poco pasada de moda y las cortinas estaban un poco raídas. personalmente, me gustaría un detallito romántico que haga la estancia más memorable. Además, no hay suficientes enchufes cerca de la cama, lo que puede ser un inconveniente, y el acceso a la tercera planta puede ser un reto si llevas equipaje. No pude tener camas individuales en mi grupo de amigas, lo que fue una limitación.